viernes, 15 de junio de 2012

Auspicia el segmento anticapitalista: Coca Cola


Advertencia: temo haber publicado este mismo post en este mismo blog.

En el futbol solo llegan a la cancha grande aquellos que son talentosos, sacrificados y tienen suerte. En la comunicación la cosa es distinta. Si bien para llegar a los grandes medios se necesita del talento y del sacrificio, el factor suerte, que en los deportes es el mas importante, es modificado por el factor afinidad ideológica. En este sentido el titulo de la nota puede echar algo de luz. Díganme ¿cuantos periodistas abiertamente marxistas trabajan como conductores en los medios masivos? ninguno, claro esta.
En los últimos años en nuestro país se ha masificado el debate sobre el rol de los medios de comunicación. Fue el propio gobierno nacional quien impulso este debate a partir de la promulgación de la nueva ley de medios. El lema de entonces fue "democratizar la comunicación", cosa que aun no ha sucedido y me cuesta imaginar que alguna vez ocurra. Quiero decir: ¿quien va a bancar con su dinero a un programa que apoye abiertamente a, digamos, el Frente de Izquierda? Ni las grandes empresas ni el gobierno nacional están dispuestos a hacerlo.
Por lo pronto deberemos conformarnos con comprar el "Hoy", "La verdad obrera" y otros periódicos marxistas y escuchar por internet programas de radio como "Pateando el tablero" (afín al FIT) y "Sobre la hora" (afín a Proyecto Sur y al FAP).
Así las cosas, la posibilidad de vivir del "periodismo militante" esta solo abierta a quienes comparten las ideas con los gobiernos de turno (hablo del gobierno nacional y de los gobiernos provinciales cuando estos tengan sus propios medios de comunicación). Me dirán que existen medios privados que apoyan la idea del periodismo militante y es cierto. La conclusión que hay que sacar entonces es que si empresas privadas financian medios afines al gobierno nacional sucede porque el gobierno nacional no representa una amenaza para sus intereses.
¿Entonces? no queda mas que decir que el problema es la lógica de financiamiento de los medios de comunicación. Quienes financian a los medios de comunicación (las empresas y el estado) tienen intereses y los medios les sirven para defenderlos. Para quienes no participan de esos intereses solo queda la comunicación alternativa: las radios comunitarias, los periódicos antes mencionados, los blogs y los canales de TV por internet (como TVPTS). Claro que si de vivir del periodismo se trata solo habrá dos opciones para marxistas y anarquistas: o dejar los ideales de lado y someterse al capital, o trabajar de algo más mientras piensan en como financiar sus propios medios.